Cuando pusimos en marcha nuestra Mini Cartera Momentum el objetivo era claro: utilizar una pequeña parte de la liquidez para obtener un flujo caja y mejorar nuestra rentabilidad. Teníamos claro el objetivo y la estrategia, pero sabíamos que era un desafío. ¿Pueden los inversores value convertirse en swing traders sin morir en el intento? Bueno, pues después de 6 agitados meses vamos a contarte cómo nos va y lo que hemos ido aprendiendo. Spoiler: ¡seguimos vivos!
¡Agárrate que arrancamos!

Value vs Trading
Hace poco leímos el libro “Lo más importante para invertir con sentido común” de Howard Marks y soltaba perlas como estas:
- Parece claro que la inversión momentum no es una forma racional de invertir.
- Olvidándonos de los inversores momentum y su bola de cristal, y centrándonos en otras formas de invertir que se basen en análisis inteligentes […]
No pudimos evitar imaginarnos a Howard Marks participando de las peleítas que hay en Twitter entre inversores de distintas filosofías.
A ver, Howard: el que tú no compartas una filosofía de inversión no significa que sea mala. Simplemente es que, a ti y a tus objetivos, no os va.
Y es que, efectivamente, no tienen nada que ver:
- Los inversores value basan su inversión en el análisis fundamental. Buscan empresas que generen rentabilidad, a un precio inferior a su valor intrínseco, y piensan en mantener la inversión a largo plazo. Dedican mucho tiempo a analizar las empresas en las que está interesado en invertir.
- Los traders o swing traders, sin embargo, se basan en el análisis técnico y el sentimiento del mercado, buscan aprovecharse de la volatilidad y la tendencia en los precios de la acción y, generalmente, operan a corto-medio plazo.
Si bien ambos buscan rentabilidad y beneficio económico, las formas de operar y pensar son muy diferentes, así como la gestión del riesgo e incluso los objetivos finales de su operativa.
Dos perfiles diferentes y dos formas de invertir distintas. Pero ¿se pueden compaginar?
Dr. Banner y Hulk
Nuestra experiencia manejando la mini cartera Momentum no puede explicarse sin tomar como referencia al Dr. Banner y a Hulk.
Dos perfiles opuestos en una misma persona.
Mientras que el Dr. Banner (value) es una persona centrada, que lee, reflexiona, evalúa a largo plazo varios escenarios, es paciente, no tiene prisa… Hulk (swing trader) es alocado, volátil, busca figuras en las gráficas, tiene que tomar decisiones rápidas, pensar a corto plazo, ser ágil.
Muchos podrán pensar que Hulk es impulsivo, sin estrategia, puro instinto. Pero no. Lo que pasa es que al Dr. Banner le lleva un tiempo entender a Hulk, conocerlo, dominarlo. Pero cuando lo consigue…. ¡Cuando lo consigue, forman un tándem perfecto!
Bueno, nosotros aún estamos en ello 😅.
Dominando a Hulk, es decir al Swing Trader
Hay quien dedica mucho tiempo a aprender algo antes de lanzarse a hacerlo. Es una opción, sí. A veces necesaria. Pero lo cierto es que hasta que no te pones a ello, a hacerlo de verdad, no lo aprendes todo. En la práctica, la teoría es otra.
En nuestro caso, partimos de un plan basado en análisis técnico básico, y nos lanzamos a la práctica.
¿Qué pasó? ¿Has oído hablar de la suerte del principiante? Pues eso. Empezamos en un momento muy alcista y nos subimos a la ola. Ojo, éramos conscientes de que lo difícil vendría después. Y vino.
Nosotros lo llamamos “coste de aprendizaje”.
A día de hoy, la mini cartera Momentum tiene una rentabilidad acumulada de aproximadamente 1%, aunque llegó a batir al SPX. Es decir, hizo como muchas acciones: subió y bajó.
Hemos cumplido con la primera regla: no perder dinero. Y hemos aprendido muchas cosas, lo cual es en sí mismo una forma de ganar.
He aquí algunas anécdotas y aprendizajes en nuestra experiencia como swing traders:
SCREENERS Y RADARES DE ACCIONES
Cuando eres inversor value dedicas mucho tiempo a buscar acciones en las que invertir, pero cuando encuentras una empresa interesante, te dedicas a ella y dejas de buscar otras. Sin embargo, como swing traders… es distinto. Necesitas agilidad porque los plazos son más cortos.
Nosotros optamos por tener un máximo de 19 valores en la mini cartera Momentum. Éramos conscientes de no estábamos familiarizados con este tipo de inversión y decidimos diversificar para mitigar riesgos. Fijamos el capital destinado para esta operativa y lo dividimos entre 19.
Esto nos está suponiendo algunos problemas:
- Ser capaces de localizar 19 acciones que den señal de entrada. Para esto hemos tenido que configurar el radar del bróker o de alguna plataforma. No siempre te ofrecen los filtros que te gustaría, así que nos ha llevado su tiempo. Todavía nos lleva mucho tiempo.
- Al principio nos inclinamos por valores más tipo growth, buscando altas rentabilidades en poco tiempo. Swing traders totales. El problema es que la mayoría subían o bajaban al mismo tiempo, así que lo de la diversificación perdía eficacia. Lo mismo si la mayoría eran del mismo sector, porque los patrones son similares y dan punto de entrada al mismo tiempo.
- A veces encuentras valores con un patrón perfecto, pero resulta que tienen poco volumen y terminan por dar un resultado muy pobre. Hay que jugar donde juega la mayoría. Un swing trader no puede jugar solo.
- Después de ganar, perder, y volver al punto de partida (como en el Parchís) nos fuimos volviendo más cuidadosos con los valores elegidos. Al ir aprendiendo más, también nos volvimos más exigentes con los parámetros de entrada. ¿Qué sucede entonces? Que encontrar los 19 valores es más complicado y pasamos mucho tiempo con bastante liquidez. Bueno, mejor eso que perder, ¿no? Si, claro, pero la rentabilidad también baja —ya que la tenemos en cuenta en el cálculo.
STOP LOSS
Mucho se habla de si los stop loss son buenos o no, pero de lo que realmente hay que hablar es del arte de saber poner los stop loss.
Para los que no sepan, un stop loss es una orden de venta automática de acciones, que se ejecuta cuando el precio llega a un valor inferior al de compra (el que tú indiques en la orden). Se utiliza para limitar pérdidas.
No hace milagros. Hay circunstancias en las que puede no funcionar bien, como cuando hay un GAP.
Pero en condiciones normales, la verdadera dificultad está en saber dónde ponerlo.
¿Lo pongo ajustado para minimizar la pérdida en caso el valor no vaya como yo pretendo?
¿O lo pongo holgadito para que la acción “respire” y no se me ejecute la orden sólo por la volatilidad?
Pues depende. Depende del análisis técnico. Depende del trade en cuestión, de tu gestión de riesgo. Depende de si vas a muy corto plazo o no tanto. En definitiva, depende de la experiencia que tengas… Ups, problema.
Los stop loss nos han librado de buenas caídas, pero también de algunas subidas. Aún estamos tratando de pillar el «arte».
ANÁLISIS TÉCNICO
Bien, si los stop loss y los puntos de entrada los marca el análisis técnico, con lo que sabíamos era poco. Estaba claro. Sin embargo, a andar se aprende andando, así que nos lanzamos a realizar swing trades utilizando herramientas básicas de análisis técnico.
Pronto vimos que resultaba imperativo aprender más.
Para obtener mejores resultados teníamos que dominar ciertos parámetros técnicos. No saberlo todo sobre análisis técnico, sino dominar las herramientas que habíamos elegido para operar, como las medias móviles, bollingers, resistencias y soportes etc.
Muchos inversores opinan que el análisis técnico son garabatos sobre las gráficas. Bueno. Esos son inversores, no traders. ¡Los traders ven matrix en el análisis técnico!
Y empiezas a estudiar patrones y figuras… en escalas semanales, diarias, horarias, intradías… y te hablan de medias, de «Fibos», de velas o candles y de toda la información que puedes sacar de cada vela… Al principio te parece como estar leyendo las rayas de las manos. No ves nada. Pero luego te tomas la pastillita roja y empiezas a identificar patrones, canales… y se abre ante ti un mundo de nuevas posibilidades.
Parece magia. Pero no es magia, es estadística. Y al final, tanto algoritmos como daytraders o swing traders en todo el mundo operan en base a estas estadísticas y a estos patrones, así que tienden a cumplirse. Aunque no siempre.
Un punto importante es que existen diferentes estrategias para hacer trading. La parte difícil es encontrar cuál se adapta mejor a tu estilo. Por ejemplo, algunos utilizan solo las medias móviles, bollinger y soportes y resistencias. Otros MACD, RSI y estocástico. Existe una infinidad de técnicas que el swing trader puede utilizar, y ninguna es mejor o peor que la otra. Pero debes decidir los parámetros a seguir y ser fiel a ellos, porque si no, te vuelves loco tratando de seguir las diferentes señales.
Otra cosa que aprendimos: es fundamental pensar en términos de riesgo/beneficio cuando decides iniciar un trade. Debes tener claro cuál es el riesgo que asumes versus el beneficio potencial que puedes obtener. Lo ideal es tener como mínimo una ratio riesgo/beneficio de 1/3. Pero es aceptable 1/2.
El caso es que dominar el análisis técnico requiere de muchas horas y mucha práctica. Y aun así no vas a tener 100% de éxito nunca, porque no es una ciencia exacta. Dicen que, para tener éxito, el número de aciertos ha de ser superior al de tus errores, y la rentabilidad de tus aciertos, superior a tus pérdidas.
Ok. Entonces “sólo” hay que hacer dos cosas:
- Maximizar el número de aciertos, cosa que se consigue con práctica y experiencia.
- Minimizar las pérdidas, decidiendo cuando vender o utilizando los stop loss… cuyo arte se adquiere con práctica y experiencia.
Práctica y experiencia, práctica y experiencia…
Conclusión ¿Conseguiremos ser buenos como swing traders?
Transformarnos en swing traders siendo inversores value está resultando más complejo de lo que esperábamos, pero muy muy interesante.
Tanto así, que el otro día en Twitter lanzamos una encuesta con la ayuda de @InversorRacional para tantear qué porcentaje de la comunidad inversora de Twitter hacía trading. Pensábamos que el porcentaje sería alto, y que muchos combinarían ambos sistemas. Pero no. Este fue el resultado:
INVERSORES vs TRADERS
— C&M Inversores (@CyMinversores) April 22, 2021
Ambos buscan rentabilidad, pero:
Trading = comprar y vender activos. Suele relacionarse con el corto plazo. La volatilidad es tu amiga.
Invertir = asignar capital en proyectos que pueden revalorizarse. Suele relacionarse con largo plazo.
🚨Encuesta🚨
— 📚𝙄𝙣𝙫𝙞𝙚𝙧𝙩𝙚 𝙍𝙖𝙘𝙞𝙤𝙣𝙖𝙡𝙢𝙚𝙣𝙩𝙚 🧐🎯 (@inviertracional) April 23, 2021
¿Os consideráis inversores o traders?@CyMinversores
Por algún motivo, ser trader está mal visto. Pero nosotros lo vemos como una operativa válida como complemento a nuestras inversiones. Eso sí, ¡hay que aprender y hacerlo bien!
El análisis técnico es todo un mundo. Un mundo que funciona, estadísticamente hablando. No es ciencia exacta. Pero ojo, un mundo donde hay que tener cuidado, porque al final la mayoría ponemos los stop loss en los mismos sitios y los grandes, lo saben.
Es imprescindible conocer bien las herramientas que el bróker y otras plataformas te ofrecen. Tanto configurar radares como saber poner alarmas y órdenes.
Somos conscientes de que una de las cosas más difíciles en el swing trading es la parte psicológica. Tener calma para aguantar que la acción siga su camino (o “respire” como decimos entre nosotros) sin cerrar la posición antes de la hora es complicado. Muchas veces, por intentar evitar que una operación positiva no termine en territorio negativo cerramos el trade con ganancias pequeñas. Pero la acción rebota y sigue subiendo. Dominar estos sentimientos es primordial para mejorar el resultado.
¿Conseguiremos ser buenos swing traders?
Pues mira, de momento nuestro porcentaje de aciertos/fallos está en torno al 50% y nuestra rentabilidad es positiva, así que vamos por buen camino. Pero tener un índice de acierto alto y rentabilidad positiva no es suficiente para batir al mercado, especialmente en un mercado alcista como el que estamos viviendo. Es necesario saber surfear las olas de la tendencia en los precios para maximizar la rentabilidad y al mismo tiempo cortar lo más rápido posible las pérdidas. Estamos en fase de aprendizaje; todavía nos falta mucho.
Pero estamos convencidos de que mientras más tipos de inversión conozcamos y más herramientas dominemos, mejor será nuestro resultado ante cualquier tipo de mercado. Así que, no vamos a dejar de ser value… pero ¡queremos dominar el Hulk que llevamos dentro!
Gracias por leernos ¡y buenas inversiones!